La presencia de moscas en la cocina es una cuestión frecuente, pero nada agradable. En las cocinas de los restaurantes, incluso cuando cuentan con unas condiciones de limpieza adecuadas, es habitual ver estos pequeños insectos. Los propietarios suelen observarlas con estupor, sin saber muy bien de dónde salen ni cómo acabar con ellas. Como empresa para el control de plagas en Galicia, te contamos que la especie que suele aparecer en estas estancias se conoce como moscas del vinagre o de la fruta. El propio nombre ya nos da pistas sobre sus hábitos alimenticios o el motivo por el que aparecen en la cocina.
El tamaño medio de estos insectos es reducido, alcanzando los ejemplares adultos los 3 o 4 milímetros. Suelen presentar colores oscuros, entre el marrón y el negro, y sus ojos son muy característicos en un color rojo brillante. Además, cuentan con un bandeado en el abdomen que hace sencillo identificar a esta especie. El principal problema que presenta la presencia de estas moscas es que se reproducen con gran celeridad. La hembra puede depositar sobre 500 huevos en diferentes superficies, siendo habitual que lo haga en la tapa de contenedores mal sellados.
A las 30 horas las larvas eclosionarán alimentándose de levaduras, líquidos ácidos o de alimentos en fermentación. Posteriormente se convierten en pupas, donde permanecen durante 5 o 6 días y dos jornadas después estos ejemplares estarán preparados para aparearse. En resumen, el ciclo completo durará entre 8 y 10 días.
Desde NovaBuxos queremos hacer hincapié en la importancia de limpiar bien la cocina profesional tras el servicio. Prestando especial atención a eliminar cualquier resto de comida. Generalmente, los alimentos más vulnerables son las salsas y algunas frutas como las uvas o los plátanos. La presencia de restos de comida en pequeñas grietas o sumideros poco utilizados son las condiciones ideales para que se desate la presencia de estos insectos.
La presencia de moscas siempre resulta desagradable, es incómoda. En el caso de los restaurantes es más importante, si cabe, eliminar las posibles plagas que puedan surgir ya que pueden empañar la imagen de limpieza y salubridad del establecimiento. Un factor determinante, que puede ser clave a la hora de que los clientes se decanten por un restaurante u otro.