termitas y carcoma Galicia

Curiosidades sobre la carcoma

¿Sabías que en nuestro país podemos identificar hasta cuatro tipos de carcoma? Estos insectos xilófagos son difíciles de detectar, ya que pasan la mayor parte de su vida en el interior de la madera y sólo salen de su escondite para reproducirse y morir. En cualquier caso, estos pequeños insectos van deteriorando las estructuras de madera y si no se detiene su expansión podrían causar importantes daños materiales. Desde nuestra experiencia en el control de plagas de termitas y carcoma en Galicia te contamos todo lo que debes saber sobre el ciclo de  vida de la carcoma para que conozcas de primera mano cuáles son sus costumbres y hábitos más habituales, facilitándote la labor de detección.

La carcoma adulta deposita sus huevos en las grietas y hendiduras que puede localizar en la madera, tras varias semanas los huevos eclosionan dando lugar al nacimiento de las larvas. Estos pequeños gusanos blancos presentan unas fuertes mandíbulas, que les permiten alimentarse desde el primer momento. Comienzan a comer la madera, creando galerías a su paso y aumentando su tamaño con el paso del tiempo. Estos insectos presentan un par de ojos que les permiten distinguir la luz de la claridad, de este modo evitan que sus galerías salgan a la superficie de la madera. Tras varios años, las larvas ascienden hasta la superficie de la madera donde forman sus capullos, estado en el que se mantendrán hasta completar su transformación. Una vez que la larva presenta su forma adulta sale de la madera para reproducirse y, así, comienza de nuevo el ciclo de la vida de la carcoma.

En NovaBuxos te presentamos los cuatro tipos de carcoma más habituales que se pueden encontrar dentro del territorio nacional

  1. Carcoma común
  2. Carcoma capricornio doméstico
  3. Escarabajo del reloj de la muerte
  4. Carcoma del polvo o polilla de la madera o el parquet

Según hemos podido comprobar desde nuestro servicio de control de plagas de termitas y carcoma en Galicia, estos insectos xilófagos suponen un riesgo para cualquier elemento de madera. Aunque su presencia es favorable en hábitats como los bosques, en los entornos rurales o urbanos constituyen una amenaza para edificaciones e infraestructuras. Estos insectos se alimentan de la parte interna de la madera durante años, realizando múltiples galerías y dejando estas piezas huecas por dentro. Por lo tanto el mobiliario, las vigas o las estructuras de madera afectadas pueden romperse o caer causando importantes daños materiales.

Es imprescindible resolver cualquier incidencia relacionada con la presencia de carcoma en nuestro hogar o establecimiento comercial. La mejor opción es recurrir a la ayuda profesional para asegurarnos de que el problema desaparecerá dejando nuestro objetos de madera libres de inquilinos indeseados.